Bigottocchio

Bigottocchio es una pequeña aldea famosa dondequiera por la ferviente religiosidad de sus habitantes, hasta que a los visitantes se pide un cuidado especial para evitar ofender la sensibilidad de los aldeanos y aun para no ser asaltados con crucifijos.
La aldea es célebre en todo el mundo por un rasgo demográfico único: el 91% de sus residentes son ancianas mujeres solteras, católicas practicantes, y sigue siendo desconocido cuál pueda ser la manera de reproducirse de esta población, puesto que el número de los habitantes es constante en el tiempo.
Se ha supuesto que se repliquen por gemación, aunque otros asuman migraciones nocturnas de ancianas fieles de las áreas vecinas. Según otros expertos, en cambio, las ancianas que desaparecen por su edad avanzada, después de las exequias, resucitan y reemprenden un ciclo vital que dura hasta la muerte siguiente.

¿Qué ver?
En la plaza principal se halla la Catedral, dedicada a la Virgen Desventurada de los Setenta y Siete Dolores Angustiosos. Al interior se hallan pinturas del decimoséptimo-siglo representando la flagelación, la crucifixión, la agonía y la transfiguración de Cristo, y una ancha colección de escenas de martirio de varios santos, entre quienes se destaca un original "San Antonio de Padua que se hace pasar encima por una cosechadora", por un artista desconocido del decimoséptimo-siglo y un "Santa Catalina de Siena que se corta las uñas en la oscuridad", pintura al óleo de inspiración caravagista.
Se permiten las visitas turisticas solamente durante las pausas entre las misas, por lo tanto cada lunes entre 21.50 y 21.52 h (excepto días festivos).
En la plaza de la Catedral, llamada plaza de los Dolores, se halla el curioso Museo municipal, exponiendo una notable colección de crucifijos de varias épocas y materiales, además de un archivo completo de todas las formas de martirio practicadas en el mundo.

Festividades y tradiciones populares
La festividad tradicional de Bigottocchio es dedicada a San Roberto Belarmino, cardenal y inquisidor, y es precedida por noventa días de ayuno, oración y contrición. Al término de esta kermés se levanta una grande pila de leña en la anteiglesia de la catedral, en que se queman los defensores de tesis heréticas o blasfemas, como la teoría de la evolución o la primera ley de la termodinámica.
Otra festividad muy sentida es la Pascua, celebrada con una representación sagrada de la Pasión, que culmina con la verdadera crucifixión de los figurantes que interpretan Jesucristo y los ladrones. Para evitar que unos figurantes rechaze fallecer en ocasión de la sagrada representación, se reclutan a extranjeros, a menudo inmigrados extracomunitarios, a oscuras de las tradiciones locales.

Artesanía
La producción típica de la artesanía de Bigottocchio es el rosario, producido en mil versiones, la más difundida de las cuales es aquella en que cada cuento es dotado de puntas agudas, adecuadas para herir los dedos del orante, para permitirle ofrecer su propio sufrimiento al Señor. Están disponibles también cilicios, combinados con los rosarios, y gatos de nueve colas por las oraciones vespertinas.
Una patente de las carpinterías locales es el confesonario electrificado, que imparte la penitencia de una manera rápida y a menudo definitiva, permitiendo entonces la inmediata administración de la extremaunción al pecador.

Gastronomía
En Bigottocchio hay apenas un restaurante, "La Última Cena", conducido por las monjas del convento de las Míseras Criadas Desamparadas Esclavas y Servidoras Sojuzgadas del Santísimo Sangre Coagulado que Gotea desde las Llagas Purulentas de Aquél Grande Guapo de Nuestro Señor Jesucristo (por brevedad nombradas también "monjas Globulinas").
Las monjas suelen cocinar en un fuego de leña y, por un voto hecho en decimoséptimo-siglo, no usan agarradores cuando retiran las ollas del fuego, de modo que la entrega de los platos en las mesas es anticipada por gritos agudísimos y hedor de piel quemada.
Incluso si la cocina es genuina, el surtido de platos no es tan ancho, y consiste en apenas un primer plato, la sopa hirviendo de paja de farro no sazonada, cuyo calor es confortabole en las noches de invierno, menos en los almuerzos de verano; el único segundo disponible es el rollo de cartilagos de pollo, con su original consistencia crujiente.
Considerada la atmósfera mística del lugar, los clientes, como sacrificio, renuncian obligatoriamente a los postres y a las bebidas alcohólicas.
Antes de las comidas es tradición recogerse en oración junto con las monjas por lo menos por tres horas. El menú de precio fijo cuesta 70 euros por persona, entregados a las misiones para la evangelización obligada de las poblaciones incivilizadas que creen en el big bang y en el heliocentrismo.

Entretenimiento
El deporte más practicado en la aldea es la oración agonística, repartida en las especialidades de duración (por ejemplo las 24 horas de Padrenuestro) y de velocidad (número de Padre-Ave-Gloria en una hora). En el caso de fieles con enfisema la oración agonística se considera como deporte extremo, y es transmitida vía satélite por canales de televisión de pago. También se practica la confesión acrobática y la penitencia "no limits", que a menudo termina con el deceso del penitente.
Otro pasatiempo muy popular en Bigottocchio es la participación a los entierros, que son celebrados casi cada día, considerada la edad veneranda de las habitantes, y que son el tema de críticas detalladas y recensiones de parte de las bigottoquiesas supervivientes, que estan en condiciones de citar como términos de comparación hasta unos entierros celebrados cuarenta años antes, que son indefectiblemente juzgados mejores que los de hoy.
Algunas parroquias bigottoquiesas adoptan también un sistema de votación con tablillas numeradas, o en algunos casos con sistemas electrónicos, que lleva a menudo a la dimisión del párroco, a consecuencia de repetidas prestaciones funerarias no satisfactorios.

Hospitalidad
En Bigottocchio no hay hoteles y la hospitalidad es posible apenas en los conventos y monasterios. Se debe recordar de todos modos que, como consecuencia de una ordenanza del alcalde y párroco don Crocifisso Energumeno, se prohíbe a hombres y mujeres de dormir en el mismo edificio, incluso si están casados. La vigilancia en la observancia de la ordenanza es confiada al cuerpo de monjas/guardias municipales que patrullan la aldea 24 horas al día.
En caso de que hayan graves perturbaciones del orden público (palabrotas, intercambio de efusiones amorosas en público) se contempla la intervención de las rondas de monjas a las cuales se otorgan poderes de policía.

Como llegar ahí
La manera preferencial de alcanzar Bigottocchio es un peregrinaje a pie, o mejor andando de rodillas, en la carretera pavimentada con piedras agudas, que lleva a la aldea. Flagelarse durante el viaje no es obligatorio, pero es de todos modos recomendable, para evitar el riesgo de experimentar el tratamiento "Giordano Bruno" asignado a los huéspedes no gratos.
En la aldea no se admiten automóviles, puesto que son juzgadas creaciones del diablo.

Contactos
Cualquier persona que quiera pasar unos días o aún apenas visitar Bigottocchio puede pedir el permiso, a través de su propio obispo, al párroco de la aldea, proveendo la solicitud con los certificados de bautismo, comunión, confirmación, asistencia a las misas dominicales y declaración de rechazo de cualquier teoría científica no aprobada por la Santa Sede.

Me disculpo por cualquier error en la traducción española:
si deseas comunicar conmígo para correcciones y/o comentarios,
escríbeme

página creada el: 7 febrero 2010 y puesta al día el: 12 febrero 2010